Si quieres entender mejor el mundo de la economía y las finanzas, debes empezar por saber qué es el dinero. Aquí te lo contamos!

Todos los días compramos o pagamos cosas en efectivo o electrónicamente. Nos parece muy normal pensar en el dinero como una transacción. Pero en la historia ese intercambio no siempre fue tan sencillo. Por eso vale la pena hacer un recuento rápido de las características y funciones del dinero con ejemplos fáciles de entender.

Primero lo primero…

¿Qué es el dinero?

Antes de las monedas y billetes que conocemos hoy, las pequeñas comunidades y sociedades intercambiaban lo que recolectaban o producían para satisfacer sus necesidades.

A esto se le conocía como trueque, pero tenía la limitación de que la otra persona tenía que querer exactamente lo que tú ofrecías.

Y aún así, si tu tenías una gallina que daba huevos y la otra persona tenía una vaca que daba leche, cómo te podías poner de acuerdo sobre cuántos kilos y litros de cada cosa eran equiparables para hacer el intercambio?

La economía clásica dice que el valor de un bien se lo da el tiempo, trabajo y esfuerzo que requiere producir ese bien. Pero esa teoría llegaría miles de años después con Adam Smith, de quien hablaremos en otro momento.

Volviendo a tema específico del dinero, la solución era encontrar cosas que funcionaran como un medio ‘universal’ de cambio. Osea, algo que yo pudiera aceptar como pago, pero que pudiera también utilizarlo para pagarle a alguien más.

Por ejemplo, durante la época del Imperio Romano la sal era un bien muy valioso, porque se utilizaba para conservar alimentos, como antiséptico para las heridas y para detener hemorragias. El bien tenía un valor intrínseco, es decir, un valor real.

Las sal podía ser incluso parte del pago realizado a soldados y funcionarios. De ahí proviene el término de lo más esperado por los Godínez cada quince días, el salario.

Pero mucho antes de los Romanos, en la historia se habían utilizado animales, especias y hasta conchas. Todos esos son ejemplos tenían un valor de uso y valor de cambio. Naturalmente, mientras más escazo, mayor sería también su su poder de intercambio.

Para seguir con el ejemplo de la sal, con cada gramo o kilo se podía comprar una cierta cantidad de otros productos. En este caso la sal tenía un ‘valor’ en el mercado, como hemos dicho, comúnmente establecido y aceptado.

En resumen, el dinero es todo bien o activo comúnmente aceptado como medio de cambio.

OK Tío Godín, ya entiendo el concepto del dinero como medio de cambio en el comercio, pero…

¿Quién inventó el dinero?

Seguramente estemos de acuerdo que cargar un costal de sal o una gallina a todos lados sería complicado. Además, si tuvieras que comprar algo que vale más que los huevos, pero menos que la gallina entera, tendrías que ir descuartizando a la pobre gallina para pagar.

También quedó claro que si un animal muere o se te mojan la sal, las especias, te quedabas sin dinero. Osea que se necesitaba también algo no perecedero y que tuvise buena resistencia.

Con el ejemplo de la gallina, quedaba claro que el dinero también tenía que ser algo perfectamente divisible.

Los orígenes del uso de metales preciosos se remontan al año 3,000 – 2,500 A.C. en China, Egipto y Mesopotamia (lo que hoyes Irak, Turquía y Siria).

Ahí se empezó a desarrollar también un pilar fundamental para el sistema monetario, la escritura, lo cual dio pie a los primeros registros de leyes, contratos y deudas.

De hecho, si te suena Babilonia y el rey Hamurabi, su famoso código lo es en parte en él se establecían multas expresadas en lingotes de oro, plata o bronce para pagar por infracciones.

Toma nota de esto último, el dinero no se contaba, se pesaba.

Fue gracias al uso de metales como esas civilizaciones lograron desarrollar sus economías a gran escala, ya que facilitaban y resolvían las dificultades que suponían el trueque y el uso de otros bienes delicados o fragiles.

¿Cuando empezaron a circular las primeras monedas?

El nuevo sistema de cambio fue muy benficioso para el comercio entre distintas zonas del mundo, por la facilidad que dio a la compra-venta de bienes y mercancías.

Pero el peso de los lingotes de metal para su transportación seguía suponiendo un problema. Tampoco eran prácticos, hablando de comercio local, para transacciones de menor valor que el propio lingote entero (como el ejemplo de la gallina descuartizada).

Para facilitar la divisibilidad se podría martillar el lingote y sacar pedazos, obvio.

Pero había oooootro problema que resolver, y es que los trozos no tenían una forma, tamaño o peso en particular. Además de que no todos los comerciantes tenían básculas para estar pesando y determinando el valor de cada cacho de lingote (Plop!)

Hacia el año 600 A.C. en al menos tres regiones distintas: Lidia (lo que hoy es la región occidental de Turquía), China e India, se pusieron las pilas y encontraron una solucion: acuñar monedas añadiendo un estampado que distinguía la zona, región o reino a la que pertenecía la pieza. (Cha-chaaaan!)

En el año 211, todavía A.C., en la antigua Roma se acuñaban fragmentos de plata de un peso espefíco llamados denarius. De ahí el término dinero en español, o denaro, como se dice en Italiano moderno.

Hemos llegado al origen del dinero en su nombre y forma más cercana a lo conocemos hoy.

Monedas Romanas

¿Y los billetes apá?

Los billetes surgieron como cheques, me explico…

Cargar monedas en un morral seguía siendo pesado (y peligroso que te robaran). Más porque en ese entonces las monedas literalmente valían su peso en oro (o plata o bronce). No como en el actual sistema fiduciario, de eso hablaremos también en otro momento.

Fue en China, alrededor del el siglo VII (ya después de Cristo), cuando una escazés de cobre provocó que no hubiera suiciente metal para acuñar monedas.

La solución del Imperio Chino fue empezar a emitir certificados en papel (de ahí el término papel moneda) por el valor de los metales que la gente y comerciantes depositaban para poder hacerse de ese dinero que no se podía obtener en metal. El Imperio custodiaba ese depósito.

Transportar valores y hacer transacciones resultó más sencillo. En lugar de monedas, la gente común y comerciantes intercambiaban esos billetes por mercancías y servicios. Los billetes tenían diferentes valores dependiendo del monto del depósito de metal que ese papel garantizaba.

Por otro lado, este sistema trajo consigo que el gobierno atesorara todos los metales, dejando a la clase dirigente el manejo de los mismos.

Si lo piensas, quien organiza la tanda en la aldea Godín, es técnicamente una entidad protectora de depósitos que valida y respalda préstamos y transacciones.

Esas figuras de protectores, garantes o prestamistas, han existido desde los orígenes del comercio a gran escala que describimos anteriormente.

Sin embargo, el nombre ‘banco‘ como lo conocemos hoy tiene origen alrededor del año 1,500, entre la época medieval y el renacimiento en Italia. Hablaremos de ellos en otro post, de momento basta solo conocer sus caracteristicas generales.

En resumen…

¿Cuáles son las funciones del dinero?

  • Medio de Cambio: Vimos como en el pasado se han usado animales, sal, especias o conchas para hacer transacciones, con todas las complicaciones que conllevaban.
  • Unidad de cuenta: Para fijar precios sin tener que descuartizar gallinas a pedazos. Con el desarrollo de la escritura se logró documentar deudas, contratos y leyes.
  • Depósito de valor: Como el cobre en China, cuando una entidad funge como protector y garante, el dinero tiene un valor respaldado por un depósito.

¿Cuáles son las características del dinero?

  • Valoración: Ya sea un billete o una moneda, tiene asignado un valor específico.
  • Escasez: No usamos piedras como dinero porque éstas son abundantes y por lo mismo carecen de valor.
  • Transportabilidad: Vimos como cargar con animales, lingotes de metal o incluso las mismas monedas de metales preciosos es poco práctico.
  • Durabilidad: La sal es un mineral que no caduca, pero la humedad puede destruirla. Un animal eventualmente va a dejar de producir. Los metales no se echan a perder y mantienen su forma
  • Homogeneidad: Vimos como martillar un lingote resulta en pedazos de metal con diferente tamaño y forma. La monedas acuñadas mediante un proceso establecido tienen a ser idénticas y su valor o denominación cambia en función del metal y/o su peso.
  • Divisibilidad: Martillar y sacar pepitas de un trozo de metal o cortar una gallina en partes para pagar no es práctico. Tampoco lo es cargar con una báscula para pesar la sal, especias o metales. La divisibilidad hace que los billetes o monedas representen una fracción de la moneda. Por ejemplo el peso o el dólar se divide en centavos, 100 centavos es un peso y así hasta cientos, miles o millones.

Hemos visto cómo que a lo largo de los años el uso natural del medio de cambio ha evolucionado. Y en la historia se ha evidenciado de manera natural que el dinero debe cumplir con ciertas funciones y carcterísticas para poder funcionar correctamente como base de una economía.

Esperamos haber explicado qué es el dinero manera sencilla para que todo Godin pueda dominar los conceptos básicos. En próximas entregas hablaremos más de los bancos, de qué le da valor al dinero, y cómo llegamos al modelo del sistema fiat, o fiduciario.

Si tienes dudas o comentarios escíbe a ernesto@mundogodinez.mx y con gusto te responderemos.


robertou

Roberto es Co-Fundador de Mundo Godínez